Sres: Brother Santo Domingo en la persona de Manuela
Rondón Nuñez,
Pamela Díaz Pérez, Yonolis Díaz Pérez.
Pamela Díaz Pérez, Yonolis Díaz Pérez.
Sr: Joan Bueno García, profesor Brother Santo
Domingo.
Sres: Paola Garcés, Lissette Mgt, Freddy Montero Galva,
estudiantes 4ta generación Brother Santo Domingo.
Distinguidos y queridos amigos:
Les
saludo con el corazón en las manos y nervioso, al escribir esta carta de
disculpa pública dirigida a ustedes.
La pasada semana abusé de su
amistad, de su confianza, y de todo el cariño que recibí en una de las
instituciones que más respeto, y de personas que ocupan un lugar muy especial en
mi corazón. Específicamente el pasado jueves 14 emití un comentario vía
Facebook, que laceró los sentimientos de más de una persona, y de más de uno de
mis colegas como publicista, situación que me duele muchísimo, ya que luego del
suceso no he dejado de pensar en ello, y no me han importarán las veces que
tenga que pedirles disculpas para enmendar el error que cometí.
Quiero externar mis más sinceras
disculpas públicamente a aquellas personas que mutilé con ese pensamiento poco
elaborado, malintencionado, estúpido, envidioso y hater. Manuela, Pamela, Yonolis, Paola, Lissette, Freddy, y sobre
todo a mi queridísimo Joan Bueno; profesor de Brother, que compartió sus
conocimientos conmigo. Quiero que sepan lo mucho que siento el haber emitido
una opinión en un momento y lugar equivocados, con un contenido del cual me
arrepiento, pues al decir semejante cosa, estoy faltándole al respeto al
trabajo que Brother está desempeñando con nosotros los jóvenes creativos, del
cual estoy muy agradecido, y de Joan Bueno quien ha sido un luchador de nuestra
creatividad por mucho tiempo y una persona con una calidad y trayectoria de la
cual me siento muy inspirado a alcanzar. Lo digo ya que he seguido su trabajo desde
hace mucho tiempo, está en la lista de personas de las que quiero aprender, y
gracias a Dios tengo el placer de conocerle, y tener esa cercanía, que te pido el
no perderla, por favor.
Brother ha sido esa gran puerta
que siempre he esperado. Años antes yo era un desconocido en el mundo de la
publicidad, no sabía cómo insertarme, no tenía un buen portafolio, tenía ideas
crudas en la cabeza, no tenía claro cómo manejar mi creatividad, no tenía ese
lugar de exposición donde corriges tus ideas, y cuentas con gente con
experiencia para que mejores, a aprender y crecer. Hoy, sin embargo, gracias a
Brother todo eso se ha transformado en lo opuesto; aprendí a pensar
creativamente, conocí mucha gente buena y estimulante, tengo nuevos amigos que
si me valoran, me entienden, me quieren, y me respetan; y tengo un camino
trazado a ser un buen creativo gracias a las enseñanzas de sus profesores.
A ustedes, mis amigos de la 4ta
generación, siento el haberles causado esa pena, de recibir tan disparatado
comentario un día tan especial como el día en que reciben un reconocimiento por
su trabajo que ha de ser arduo, pues recuerdo mis vivencias en la primera
generación y me consta, no son fáciles. A ustedes quiero tenerles cerca, para aprender,
ustedes son parte de mi generación, y sé que trabajarán por elevar la
creatividad dominicana, que es el sueño que también persigo. Les reitero mi más
sincera disculpa, no les conozco en profundidad, pero espero algún día tener
ese placer. Debo respetarlos ya que están en una de las agencias más importante
del país, cosa que aún yo no he logrado, y siempre he querido lograr.
Quisiera por favor, este mal
intencionado desliz de mi parte quede olvidado, más sus borrones serán
recordados por mí como aprendizaje, de cómo el orgullo equivocado puede dañar
amigos. Entiendo que puede serles difícil ayudarme con eso, pero confío en su
buen corazón para aceptar esta disculpa sincera y amable, ya que les escribo
con el corazón en la manos, y hasta que no me perdonen no dejaré de recordarles
lo mucho que lo siento.
Ese comentario no representa lo
que en realidad yo soy, pues a lo largo de todas las cosas difíciles que he
pasado, lucho cada día por ser mejor persona, y no está en mí hacerles a otros
lo que he sufrido, y lo que no me gustaría que me hagan.
Espero acepten ésta sincera
disculpa y sigamos siendo amigos.
Se despide,
Cristian Rodríguez de León